domingo, 26 de febrero de 2017

No son lo mismo

Después del "asunto del Correo", es más complicado defender la visión de un gobierno incorrupto. Escuché en varios lugares la opinión de "al final, los gobiernos son todos lo mismo".

¿Son lo mismo? Pensé un poco comparando los gobiernos entre 2003 y 2015 (gobierno A en lo sucesivo), y el actual (gobierno B). Y no, no son lo mismo. Va una pequeña comparación en tres partes.
Me parece súper importante poder distinguir, salir del "son lo mismo", poder discernir en qué se parecen y en qué difieren.

Está claro que a mí me gustaba más el gobierno A que el B. Invito a los que lo vean distinto, que agreguen ítems que favorezcan al segundo, o que indiquen qué de lo que menciono es incorrecto.

1. Contrapunto.


El gobierno A, apenas asumió, mejoró la calidad de la Corte Suprema, y también el mecanismo de selección de sus integrantes.
El gobierno B, apenas asumió, asumió intentó colar "por la ventana" dos jueces en la misma Corte.

El gobierno A fortaleció el programa REPRO, que se hace cargo de parte de los sueldos de empresas en problemas, para cuidar las fuentes de trabajo.
El gobierno B disminuyó en gran medida el alcance de este programa. https://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-301255-2016-06-08.html.

Durante el gobierno A la desocupación pasó de dos dígitos a uno.
En 15 meses de gobierno B estamos cerca de volver a los dos dígitos.

El gobierno A reforzó el programa Remediar (que arrancó en 2002) de entrega de medicamentos a poblaciones desfavorecidas.
El gobierno B lo discontinuó. http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2017/02/17/metropolitanas/AREA-03.html.

El gobierno A recibió un país que recién salía de una crisis profunda, en lo institucional, económico, social, político, por donde se mire.
El gobierno B recibió un país que funcionaba, caminaba, aunque cojeando de a ratos.

El gobierno A impulsó el programa Conectar Igualdad, que proveía de una notebook a cada alumno de secundaria de la Argentina, y además se proponía crear una red digital que cubriera de verdad todo el país, y favorecía la generación de software operativo y educativo producido en Argentina.
El gobierno B, apenas asumió, cerró la parte de generación de contenidos, y echó a (al menos) parte de la gente que se encargaba de armar las redes y mantener la infraestructura en cada escuela. En 2016 se distribuyeron solamente las computadoras que sobraron de 2015. En 2017, estando a 26 de febrero, no hay noticias ciertas de qué va a pasar.

Ni el presidente ni ningún alto funcionario del gobierno A aparecen en los Panama Papers.
El presidente del gobierno B, y (si la memoria no me falla) algunos funcionarios, sí.

El gobierno A tuvo dos secretarios de Comercio. El primero e un ferretero de barrio. El segundo un docente universitario. Esto dicho independientemente del mayor o menor mérito de sus gestiones.
El secretario de comercio del gobierno B es dueño de una de las cadenas de supermercados más importantes del país. En esa misma tónica, el ministro de Agroindustria es productor mediano-grande y directivo de la Sociedad Rural, y el ministro de Energía y Minería fue CEO de Shell Argentina hasta un rato antes de asumir.

El gobierno A fortaleció de varias formas el funcionamiento del sistema universitario público.
El gobierno B le dedica desfinanciamiento y desinterés oficial, que prometen ir en aumento en 2017. Se logró evitar un recorte mayúsculo en el financiamiento del sistema universitario en 2017, que estaba previsto en el proyecto oficial de presupuesto, sólo por la movilización.

El gobierno A redujo en gran medida la vulnerabilidad asociada a la deuda con extranjeros, denominada en moneda extranjera. En particular, implementó el programa de canje de deuda más voluminoso de la historia mundial.
El gobierno B tomó deuda, y también indujo a varias provincias a tomar deuda, con extranjeros, denominada en moneda extranjera, por unos 50 mil millones de dólares, sólo en 2016. Y todo parece indicar que en 2017 va a seguir un camino similar.

El gobierno A mencionaba la situación que recibió, para resaltar sus logros.
El gobierno B menciona la situación que recibió, para excusarse por la ausencia de logros.

El gobierno A tomó varias medidas que fortalecieron las finanzas del estado. Menciono dos: el mantenimiento, e intento de aumento, a las retenciones a la exportación de granos, minerales y petróleo, y la nacionalización de los fondos de jubilaciones, formándose el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS). A partir del FGS, el Estado pudo colocar directores en varias empresas importantes. Al respecto es interesante leer https://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-301054-2016-06-05.html.
El gobierno B redujo las retenciones agropecuarias, eliminó las de minerales y petróleo. Respecto del FGS, habilitó la venta de acciones en poder del FGS, que hasta mayo de 2016 estaba prohibido por ley. También hubo cambios sobre la participación en el directorio de empresas, ver http://eppa.com.ar/el-nuevo-papel-de-los-directores-de-anses/.

El gobierno A tuvo un año (2014) con 40% de inflación, uno (2009) de recesión y baja del empleo importantes. Ninguno en que se conjugaran los tres factores.
El primer año del gobierno B tuvo los tres factores, sumado a un aumento fenomenal de la deuda externa.

El gobierno A facilitó los juicios por crímenes llevados a cabo durante el Proceso de Reorganización Nacional.
El gobierno B facilita juicios por delitos llevados a cabo durante el gobierno A. Esto incluye prejuzgamientos explícitos por parte del presidente y varios ministros, que hablan públicamente de delitos de corrupción que están en juicio.
Un botón de muestra: https://www.pagina12.com.ar/22476-la-avanzada-del-juez-bonadio. Para comparar, el artículo sobre el mismo tema, el mismo día, en La Nación: http://www.lanacion.com.ar/1988083-detectaron-mas-inmuebles-que-los-kirchner-ocultaron. Obsérvense del segundo las cifras que consigna, y compárenlas con la de cualquiera de los asuntos turbios que involucran a la familia presidencial del gobierno B. Comparen la claridad de los dos artículos. Y después me cuentan.

El gobierno A puso restricciones a la entrada de capital especulativo.
El gobierno B las eliminó.

El gobierno A definió un plan de fortalecimiento de la actividad científica, que planificaba (entre otras cosas) la cantidad de ingresos a la carrera de investigador en el CONICET hasta 2020.
El gobierno B postuló, para 2016 y 2017, una cifra menor a la mitad de lo previsto en ese plan.

El gobierno A se mantuvo en la línea que propuso en las sucesivas campañas electorales. Creo que la dirección del gobierno A, sobre todo a partir de 2007, no sorprendió a nadie.
El gobierno B incumplió la mayor parte de las promesas mencionadas explícitamente en campaña, tanto en medidas concretas (p.ej. derogar Ganancias para trabajadores) como en políticas generales (tender a pobreza 0, mantener "lo bueno" del gobierno A, no quitarle a nadie lo que tuviera).


2. Durante el gobierno B se dieron cosas para los que no encuentro correlato en el gobierno A.


Se derogó parte de una ley por DNU, para impedir que algunas grandes empresas tuvieran que adecuarse a la misma. Hablo de la "ley de Medios".

Se intentó licuar/condonar la deuda de una empresa de la familia del presidente con el Estado, por 300 millones de dólares.

Se destinaron por Decreto de Necesidad y Urgencia, 2800 millones de dólares del presupuesto para evitar que se cayera una licitación adjudicada, en parte, a una empresa que el presidente le vendió a su primo. Los adjudicatarios se habían comprometido a conseguir financiamiento, cosa que no hicieron. http://www.ambito.com/844441-dnu-del-gobierno-para-obra-publica-beneficia-a-calcaterra.



3. Por otra parte, en algunos aspectos, los gobiernos A y B han coincidido.


Ambos le hicieron enormes favores al grupo Clarín: permitir la absorción de Cablevisión en 2007, anular la Ley de Medios y regalar una licencia de uso de banda 4G en 2015 y 2017.

Ambos salvaron al juez Bonadío de su merecido apartamiento del cargo, el gobierno A más bien por inacción, el gobierno B por acción positiva (se archivaron varios expedientes que tenía abiertos en el Consejo de la Magistratura).

Ambos mantuvieron un dólar subvaluado. En febrero de 2017 la competitividad del peso es sólo 7% superior a noviembre de 2015.

Los dos habilitaron blanqueos generosos, por decirlo de alguna forma. El del gobierno B fue más allá, al no pedir que los fondos declarados se repatriaran, sólo que se declararan y pagaran una multa. Además, cambió la letra de la ley en el decreto reglamentario, para que los familiares de funcionarios pudieran sumarse (p.ej. http://www.perfil.com/politica/macri-autorizo-por-decreto-que-familiares-de-funcionarios-entren-al-blanqueo.phtml).

Los dos provocaron reacciones del estilo "esto parece Venezuela".
Ejemplo del gobierno A: el "cepo cambiario", la sucesión de mensajes por cadena nacional.
Ejemplos del gobierno B: los faltantes de manteca y aceite (2016), el pedido de no usar la computadora más de 4 horas por día, ni el lavarropas más de 3 veces por semana (2017).

Ambos tienen una parte de la prensa furiosamente a favor.